Uno de los principios fundamentales para hacer comunicación y marketing en la actualidad es la de hacer las cosas simples a causa de la preponderancia de las redes sociales. En esta dirección se crearon los hashtags: llevar cualquier tipo de conversación entre distintos clientes potenciales en el entorno de Internet. Así, era y es habitual ver en la mayoría de espacios publicitarios de cualquier plataforma, un espacio reservado a colocar una etiqueta que relacione el anuncio en cuestión con su campaña correspondiente.
Pero siguen siendo necesarios los hashtags? En redes como Twitter siguen teniendo una utilidad porque ayudan a agrupar temas y a confeccionar utilidades como los trending topics. También siguen funcionando a Instagram de manera que permiten vincular contenidos relacionados a través de una fotografía pero, en cambio, a Facebook no han terminado de cuajar a pesar de que la misma marca los potenció.
Nuevos estudios como los realizados por la empresa iSpot.tv exponen que aunque las empresas continuan utilizando masivamente herramientas para transportar los clientes de la televisión hacia las páginas web, cada vez se utilizan menos los hashtags. Así, mientras el 2014 las cifras de inversión que iban con la intención de redirigir los usuarios a las respectivas webs eran de 1.400 millones de dólares al mes, las últimas cifras publicadas el pasado 2017 explican que ya se destinan 3.000 millones de dólares al mes para este tipo de operaciones. Esto pasa porque las marcas han invertido en la mejora de sus páginas webs corporativas y además les permite redirigir una conversación hacia un sitio que ellos controlan completamente.
Más que un cambio de moda, la eliminación del hashtag demuestra un cambio interno a nivel de mercado. A día de hoy, las marcas son más hábiles para llevar los clientes hacia donde ellas quieren. Eso les ha permitido dejar atrás unas campañas que finalmente eran muy complicadas, ya que no hacían más que potenciar la creación de conversaciones y más conversaciones que escapaban del control de la empresa.
